Muy buenas tardes señores pasajeros.

Después de unos días de descanso y desconexión muy disfrutados y necesitados, aquí estamos, volando otra vez a un nuevo destino.

Por si no tenía suficiente ya con los cambios de avión, la suelta de comandante, la adaptación a la nueva cartografía y los nuevos conceptos en la instrucción, desde hace unos años renació en mi una inquietud por completar mi formación.

Según la normativa vigente durante muchos años, en España la titulación de piloto de línea aérea fue considerada a nivel académico una licenciatura, pero desde hace tan solo un par de años apareció la posibilidad de transformar esa licenciatura en un grado universitario cursando un curso en Adventia con el respaldo de la Universidad de Salamanca.

El pasado año me matriculé. No es necesario ni requisito para ejercer la profesión, especialmente una vez llegados al nivel en que nos encontramos ya trabajando y llevándoles a ustedes por medio mundo, pero como el “saber no ocupa lugar” decidí inscribirme y tras un año de estudios, ya hemos terminado y digo hemos porque hemos sido un pequeño grupo de veintipocos los atrevidos que nos hemos embarcado en esta aventura universitaria.

Ha sido un año intenso,  ya que ponerse a estudiar mientras se trabaja y a estas alturas de la vida, no es sencillo compaginar las agendas familiares y profesionales con las formativas. Aún así no me arrepiento, ya que volver a las aulas es algo recomendable y enriquecedor en muchos aspectos y no solo académicos.

A principios de mes he defendido por fin, mi Trabajo de Fin de Grado frente a un jurado, cosa  a la que nunca me había enfrentado, y me ha encantado. Nervioso pero muy interesante. A los pocos días ha sido la ceremonia de imposición de becas nada más y nada menos que en el Colegio Fonseca de Salamanca, junto a los otros compañeros de curso y también los estudiantes que desde cero han empezado en esta promoción de Adventia.

Ha sido una ceremonia muy bonita en la que ver en sus caras los nervios de creer saber lo que les espera mientras nuestras miradas los observaban a ellos con la vista desde la experiencia vital de miles de horas de vuelo era todo un contraste.

Pronto estarán por aquí con nosotros en estas cabinas u otras volando, aprendiendo y  surcando los cielos mientras hacemos de sus viajes los más placenteros posibles.

Tal como hoy, que vamos llegando al meridiano 60 Oeste y las nubes parece que se alejan mientras avanzamos en curso a Panamá. Mientras ustedes disfrutan del nuevo servicio de conectividad vía wifi a bordo y ven las películas en sus pantallas, aquí delante vamos tranquilamente disfrutando de una tarde fantástica llena de luz y azules.

En unas 3 horas llegaremos a destino donde nos espera un aeropuerto con bastante tráfico ya que hoy es un día de muchas operaciones al ser Viernes, algún chubasco aislado y una agradable temperatura rondando los 25ºC.

Muchas gracias por elegir venir hoy con nosotros a disfrutar de estas vistas y este breve viaje.

Espero poder volver a verles pronto a bordo.