Muy buenas tardes señores pasajeros.
Llevamos casi 6 horas volando el paralelo 41 norte, casi desde que entramos en el Atlántico en nuestro vuelo hacia Miami. Si seguimos recto llegaríamos a New York, y aunque me encanta esa ciudad, hoy ustedes prefieren ir a Florida. En breve viraremos a un rumbo más suroeste, casi paralelo a la costa este del continente americano, hacia Bahamas sobre Freeport, y de allí en línea recta hacia nuestro destino.
No vamos en línea recta hacia Miami porque esta curva es el camino más corto y más eficiente ya que evitamos las zonas turbulentas que hoy están más al norte en el océano,y así podremos ofrecerles un viaje notablemente más cómodo y tranquilo.
Constantemente vemos a nuestro alrededor situaciones que pueden parecer una tontería, o un detalle sin significado o consecuencias. En nuestra vida diaria es normal y vivimos rodeados de cosas que nos pasan a las que no damos importancia, pero ahí están. Hoy, por ejemplo, estaban ustedes tranquilamente abordando el avión cuando de repente los detienen porque estaba desembarcando al lado nuestro un vuelo que venía de otro país sudamericano. Esto ocurre no solo para que no se junten y así evitar confusiones innecesarias, sino porque para los vuelos a USA se crea una especia de zona “estéril” en la terminal que protege a los pasajeros a estos destinos,envolviéndolos en una burbuja superior de seguridad con mayores controles de vigilancia y supervisión.
Después estuvimos más de lo requerido en la cabecera de pista, previos al despegue, porque un avión que iba hacia Venecia avisó de la existencia de una bandada de estorninos en la carrera de despegue. Parece ser que impactó con ellos pero no tuvo consecuencias para su vuelo y continuó, pero se pone en marcha un protocolo de comprobación de pista por el que se paran todos los despegues, y dos coches ( señaleros ) van por toda la pista a toda velocidad buscando restos de las aves o cualquier objeto suelto en el asfalto. Esto se hace para evitar la ingestión por los motores de los aviones que esperan detrás para despegar.
Como consecuencia se acumulan aviones en el punto de espera y allí estábamos nosotros como número 8 para despegar. Finalmente lo hicimos y a pesar de todo llegaremos a Miami unos 10 minutos antes de la hora programada.
Las pistas se revisan cada vez que ocurre algo parecido y además de manera regular cada cierto tiempo varías veces al día. El vuelo 4590 de Air France no consiguió llegar al destino porque ( entre otras causas ) en la pista había un trozo de metal de un avión que había despegado anteriormente.
Muchas de las medidas de seguridad con el pasaje provienen de los sucesos del 11 de Septiembre y, aunque parecen inútiles algunas de ellas, tienen un gran efecto positivo en nuestra operación tanto a nivel local como mundialmente.
Aprendemos de nuestros errores y a base de implementar rutinas y protocolos nuevos hacemos que esto tan mágico que es el volar, sea cada día un fenómeno más y más seguro.
Aún así a mi me sigue conmoviendo la facilidad con la que hoy en día cruzamos el Atlántico y unimos culturas, historias, amores y personas en tan breve espacio de tiempo.
Muchas gracias una vez más por usar nuestras alas y hasta la próxima.


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